Lo que no se habla: el lado oscuro de la maternidad

Lo que no se habla: el lado oscuro de la maternidad

La maternidad puede ser de muchos colores pero no siempre “color de rosa”, porque nos confronta con lo mas profundo de nuestro espíritu y nos despoja de cualquier rastro de egoísmo y espacio

Ya hemos dicho antes que la maternidad puede ser de muchos colores pero no siempre “color de rosa”, porque nos confronta con lo mas profundo de nuestro espíritu y nos despoja de cualquier rastro de egoísmo y espacio, porque al convertirnos en madres entregamos todo…

Esta sensación llevó a Alexandra Kilmurray, una chica de Florida, Estados Unidos a hablar sin tapujos de la maternidad, si de esa maternidad que deja estragos en el cuerpo y en la mente y que atormentan a más de una mujer en este mundo… A través de su cuenta de Instagram, mostró ese  “largo y oscuro camino del posparto”.

Hay quienes puedan identificarse o no con la fotografía compartida por Alexandra, la importancia es lo que una mujer que alza la voz puede lograr dando voz a muchas otras que no se atreven, darle normalidad a los cambios corporales, aceptación y finalmente validación para culminar en felicidad es lo que nos comparte en su foto… A través de su cuenta de Instagram, alexandrabrea_ mostró una foto de su abdomen con estrías tras dar a luz a dos niños.

Well, I know a lot of you guys are probably thinking ‘why would she post this picture’, but, it took me 18 months to get here, 18 months to not cry when I look in the mirror, 18 months to finally feel beautiful in my own skin again! No one warns you about the dark sides of motherhood and pregnancy.. no one gives you a heads up on how much you change physically and mentally after you become a mother. It’s been a long and hard postpartum ride for me.. 18 months after my first son and 5 months after my second son I feel like I can finally see the light ✨ and it genuinely feels amazing💖 cheers to you mamas who are battling postpartum depression and still getting up everyday for your children! Cheers to you mamas who still cry about the marks on your skin from birthing your perfect babies! Cheer to motherhood, cheers to knowing that this too shall pass! And things will get better💗 #motherhood #breastmilk #breastfeeding #normalizebreastfeeding #mommyandme #tigerstripes #postpartum #postpartumdepression #babies #mombod #proud #inlove

Una foto publicada por Alexandra Kilmurray (@alexandrabrea_) el 12 de Ene de 2017 a la(s) 2:59 PST

Según sus palabras, pasó meses llorando frente al espejo al ver el cambio de su cuerpo.

 “Sé que muchos de ustedes probablemente están pensando por qué publicaría esta imagen, pero me tomó 18 meses llegar aquí, 18 meses para no llorar cuando me miro en el espejo, 18 meses para finalmente sentirme hermosa en mi propia piel otra vez. 18 meses después de mi primer hijo y 5 meses después de mi segundo hijo finalmente puedo ver la luz y de verdad se siente genial, aplausos a todas las madres que están librando la batalla contra la depresión postparto y que aún así se levantan todos los días por sus hijos. Porras a todas las madres que aún lloran por las marcas en su cuerpo por haber dado a luz a sus perfectos bebés. Salud por la maternidad, porque sabemos que esto también pasará y que las cosas van a mejorar”…, escribió.

Alexandra envió el mensaje en apoyo a aquellas mujeres que aún no pueden superar sus cambios tras la maternidad.

“Nadie te advierte sobre los aspectos oscuros de la maternidad y el embarazo. Nadie te dice que cambiarás mental y físicamente después de que te conviertes en madre”, continúo.

Para culminar su épico escrito dijo:

“Aplausos para ustedes mamás que están luchando contra la depresión posparto y todavía tienen que levantarse todos los días para sus hijos ¡Saludos a las mamás que todavía lloran sobre las marcas en tu piel tras parir a tus bebés perfectos!”.

 Aceptar la maternidad en todos sus tonos es saber que nunca volveremos a ser las mismas, probablemente seremos mejores personas porque hemos cedido en el acto de amor mas sublime: amar a un hijo y cuando la entrega nos ha dejado marcas podemos casi equipararlas a condecoraciones que la vida da al valor, al coraje, a la entrega incondicional. Si, es verdad, la maternidad no es color de rosa y no todo es felicidad absoluta, pero la recompensa siempre está aunque no se busque, aunque no sea el objetivo: hijos sanos, plenos, felices, aprendiendo (ojalá) de nuestra propia salud, plenitud y felicidad, porque la piel, el peso, la talla son lo de menos, vivir el aquí y el ahora cómodas y amando nuestra nueva piel es lo importante.