Ser Madre, Esposa, Actriz, Productora, Conductora, Empresaria, Amante, Hija, Amiga, Bloguera bla, bla, bla y no morir en el intento…

Ser Madre, Esposa, Actriz, Productora, Conductora, Empresaria, Amante, Hija, Amiga, Bloguera bla, bla, bla y no morir en el intento…

Nadie es perfecto en lo que hace, pero muchos (TODOS) podemos ser felices mientras lo hacemos, elegirlo dará tanto brillo a esas actividades que sobrepasarán la perfección al convertirse en momentos mágicos…

¡Qué flojera solo de leerlo!, ahora hay que estar, decidirlo, serlo y por elección y convicción gozarlo, pues aún y con lo loco que pueda sonar, nunca he estado tan feliz y vaya que me creo la muy muy, cuando de felicidad se habla yo presumo en fiestas, reuniones y entrevistas que aprendí a ser feliz muy niña, feliz por elección, pero no es mentira, si aprendí a serlo, por práctica y practicidad y lo he sido siempre y lo soy, más que nunca, ahora lo soy.

Sin embargo y con toda honestidad uno puede enloquecer en cualquier segundo cuando está intentando conseguir todos sus sueños a la perfección hasta que… ¡EUREKA! te das cuenta de que no se trata de PERFECCIÓN se trata de ¡TU vida!: tuya tuya tuya y de nadie más, no se trata de supuestos, no se trata de historias que contar, ya se preguntaba el gran Jaime Sabines: “¿Es qué hacemos las cosas solo para recordarlas?, ¿Es qué vivimos solo para tener memoria de nuestra vida? por que sucede que hasta la esperanza es memoria y el deseo es el recuerdo de lo que ha de venir.”

Hagamos las cosas con el corazón, esa ha sido mi elección y no la de ser la mejor esto o la mejor aquello, no lo soy, no pretendo serlo, no me interesa, me importa el hoy, lo que estoy haciendo ahora y en ese camino se quedan muchos correos sentados un rato, llamadas por responder, mensajes de whastapp porque estoy ocupadísima jugando con mi hijo, dando pecho o en una junta, o en fotos, o platicando con una amiga seriamente de todo y de nada, darle al momento, el peso absoluto de ser todo lo que tengo que hacer en ese momento ha sido mi éxito, mi poder para amar lo que tengo entre manos y permitirme la mayor efectividad posible.

5 elecciones diarias que nos pueden ayudar a todas a crear un feliz día a día mientras realizamos nuestros sueños de la mano de la maravillosa, exigente y transformadora realidad de la maternidad:

1. AMAR EL DÍA: Yo amo cada día como un tesoro, sin mañana sin ayer, agradezco estar viva todos los días, cuando las cosas salen como quiero lo celebro y cuando no, lo agradezco. No me miento, si me enojo me enojo y después me dejo ser feliz de nuevo, nada es para siempre, dejo ir, dejo ir, dejo ir, fluyo… Todo esto por que me he entrenado para hacerlo, por convicción.

2. VIVIR EN CONSCIENCIA EL AQUÍ Y EL AHORA: Me enfoco en lo que estoy haciendo, estoy en el aquí y el ahora, abrazo mis posibilidades y mis imposibles, abrazo lo que soy y lo que no soy, no estoy pensando en “los otros” cualquiera que eso signifique, no pienso en otras actrices, conductoras, madres, diseñadoras en lo que son o no son, en lo que tienen o no tienen comparándome, es decir; no gasto mi energía en el juego absurdo del “yo vs., otros” porque en ese juego se gana y se pierde todo el tiempo, y la energía de la que disponemos para realizar nuestros sueños se nos diluye casi a cero en esto…, yo tengo lo que tengo porque lo merezco y así cada persona a mi alrededor, trabajemos por lo nuestro y aprendamos a celebrar lo que los demás son y tienen, la vida es para cada uno lo que cada quien necesita para aprender y crecer, que a final de cuentas es para lo que estamos aquí, encarnados, vivos en constante evolución.

3. PLANIFICA Y SUELTA: Hago planes claros y posibles de alcanzar, sin dejar de soñar grandes cosas, pero con la certeza de que para llegar a esas grandes metas necesito de cada paso que doy. Cualquier gran logro en el exterior es pasajero, cualquier logro en el interior, grande o pequeño es para siempre, por eso mi enfoque desde hace ya varios años es en mi crecimiento personal, sin dejar de hacer y crear en el plano material por supuesto, pero sin dejar que ese plano material quite energía de lo que importa: mi familia, mi alma, mi relación espiritual con Dios, mi felicidad, mi vida real, porque lo que hacemos en el mundo material es un regalo, si, pero no es permanente, en cambio lo que hacemos a nuestro propio ser si lo es y finalmente mientras más fuerte y bello es adentro más lo es afuera.

4. PASO A PASO: Estoy consciente de que no puedo hacerlo todo al mismo tiempo, así es que no corro desesperada detrás de todo lo que quiero lograr, voy paso paso a paso, me doy permiso de fallar y reírme y me doy permiso de triunfar y REÍRME, entendamos que el mundo es una creación impermanente, que con este nombre y cuerpo con el que nos identificamos ahora no es eterno, somos más que carne y hueso y si podemos verlo, podremos reírnos con el juego de la vida y gozarlo mientras alcanzamos nuestros objetivos humanos siempre cuidando crecer en lo que importa, en nuestros objetivos espirituales.

5. RELÁJATE Y OBSERVA: Cuantas veces perdemos el control por estar inmersas en la situación, porque nos tomamos tan en serio que no podemos dar un paso atrás y observar la situación que nos angustia en su justa medida con perspectiva, date la oportunidad de tomar distancia de los eventos, de parar y quitarte del lugar de la Protagonista para ser solo una testigo, ¿Qué puedes aprender de lo que está pasando? Siempre hay una lección y esa es la bendición de cualquier situación y esa la llave de la felicidad cotidiana.

Nadie es perfecto en lo que hace, pero muchos (TODOS) podemos ser felices mientras lo hacemos, elegirlo dará tanto brillo a esas actividades que sobrepasarán la perfección al convertirse en momentos mágicos, entonces tendremos vidas PLENAS y nadie muere en la constante de la felicidad y la plenitud, esa es la clave, la llave mágica.

Amando se entiende la gente.

Claudia Lizaldi

@ClaudiaLizaldi