Yoga en el embarazo

Yoga en el embarazo

Practicar yoga durante el embarazo siempre es recomendable para las futuras mamás, sin olvidar contar con una guía correcta para procurar nuestra salud y una sana evolución del bebé.

Mantenerte siempre balanceada física y emocional es muy importante, y practicar yoga durante el embarazo siempre es recomendable para las futuras mamás, sin olvidar contar con una guía correcta para procurar nuestra salud y una sana evolución del bebé.

Durante el primer trimestre del embarazo los ejercicios deben concentrase en la respiración y procurar la relajación; estas dos técnicas ayudaran a reducir las náuseas de los primeros meses. Las posturas deben ser suaves y relajadas, y complementar con una correcta hidratación.

Las posturas de yoga durante el embarazo dependen del tiempo de gestación, aunque las más recomendadas son: 

Postura Mariposa: Consiste en sentarse sobre el piso, manteniendo la columna vertebral recta. Se juntan las plantas de los pies, y tratar de acercarlas lo más posible a la zona del perineo. Hay que mantenerla durante unos segundos, ya al mismo tiempo se realizan ligeros ejercicios de respiración.

Postura “En Cuclillas”: Se trata de ponerte de cuclillas, apoyando los talones sobre un tapete, mantener la postura y repetir tantas veces como desees. 

Es muy importante estar seguras, informadas pero también cómodas para realizar yoga durante el embarazo. Por lo que contar con la ropa adecuada, que nos permita sentirnos protegidas y flexibles es imprescindible para un correcto ejercicio.

Debemos evitar telas que nos rocen o que nos hagan sentir muy justas. Es vital sentirnos cómodas para disfrutar plenamente de la rutina y aprovechar todos los beneficios que esta nos brinda. ¿Dónde? Obvio, en Liverpool.

Son  muchos los beneficios de practicar yoga durante el embarazo, este deporte ayuda a mejorar nuestro útero, la columna vertebral,  el corazón, el sistema circulatorio, los pulmones y hasta el sistema digestivo. Incluso puede propiciar que el bebé gire, si no está de cabeza, y facilitar el parto.

Puedes practicar en casa o en espacios abiertos, tomar clases o seguir algún tutorial. Solo asegúrate de estar en capacidad de hacer ejercicio y disfruta.